Sigue la confusión en torno a la comunión del Metropolita Nicolae de Banad en la celebración de consagración de un lugar de culto greco-católico el pasado 25 de mayo en presencia del Nuncio de Roma en Rumanía.
Conviene tener en cuenta las declaraciones siempre a favor de los Uniatas en Rumanía a pesar de las tensiones y conflictos que han creado en Transilvania, algunas veces en contra de declaraciones del Metropolita Bartolomé de Cluj, hermano suyo e el episcopado ortodoxo. Dicho Metropolita Nicolae fue profesor del actual Patriarca Daniel favorable al diálogo con Roma.
Téngase también en cuenta que el día 25 de Mayo era la fiesta del tercer encuentro de la cabeza de San Juan Bautista (fiesta de polieyos) y lo normal es que hubiera estado celebrando dicha fiesta en la Catedral Metopolitana con los fieles y el clero de su Metropolia.
Dicho esto y ya que se pregunta cual hubiera sido la reacción normal ante la incomprensible e inexcusable comunión del Metropolita, lo normal hubiera sido que el Patriarca hubiera suspendido temporalmente al Metropolita si se quiere hasta que en julio hubiera dado una explicación. En caso de no poder dar una explicación convincente quedaría reducido al estado monacal en un monasterio.
Por las opiniones de algunos católicos que leen este blog, decir que ESTO NO ES JUZGAR A NADIE, si no simplemente actuar en consecuencia a la gravedad del hecho cometido. ¿Por qué no se actúa así? Debería de preguntárselo al Patriarca Daniel y al Santo Sínodo. Desde luego y por la trascendencia de hecho, además del material fotográfico que así lo confirma, no hay excusa para no tomar las medidas pertinentes y terminar con este despropósito.
Parece que se encuentre este hecho en esa política de ir suministrando al pueblo pequeñas dosis de veneno de manera que acciones como estas, ver a sacerdotes uniatas y ortodoxos celebrando y rezando juntos, oír la manida frase de que es poco lo que nos separa, que los errores teológicos no son más que teologúmenos, el pueblo se inmunice de manera que no reaccione cuando definitivamente sea mordido por la serpiente y no se levante contra los jerarcas impíos como sucedió después de la reunión de Florencia
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