miércoles, 11 de mayo de 2011

COSAS MAL HECHAS Y COSAS BIEN HECHAS

Hay cuestiones que pueden resultar muy curiosas y que es necesario que las pongamos delante de nosotros para poder reflexionar seriamente sobre ellas.

Baptizo significa sumergir, por lo que este Santo Misterio de la Iglesia tendría que llamarse "Misterio de la Santa Inmersión"

En la Iglesia Ortodoxa este Misterio sólo tiene una forma posible: la triple inmersión en el agua en el nombre de la Santísima Trinidad.

En caso de peligro de muerte y no teniendo la suficiente agua para poder realizar la inmersión se permite como caso excepcional la aspersión.

Por desgracia, por comodidad de los que celebran, y en definitiva por contagio de formas ajenas totalmente a la Ortodoxia como son las practicadas por papistas y protestantes, son muchos los que van introduciendo la aspersión como forma cada vez menos extraordinaria de administrar el Santo Bautismo.

En Semana Santa llegaba la noticia de un bautismo múltiple en Serbia y la foto era muy triste, más vale que no la hubieran publicado. Varios sacerdotes bautizaron a quientos jóvenes frente a la iglesia de San Marcos de Belgrado el Domingo de Ramos.


Es de suponer que estarían todos a punto de morir o que el río bajaría completamente seco o que habría un corte general de agua...

Otro caso, Zimbabwe, el Metropolita Giorgios del Patriarcado de Alejandría bautiza a trescientos veintisiete catecúmenos, acompañado del Protohierei George Saganis de Atenas y el sacerdote autóctono  P Raphael Gada.



Es qué hay más medios en Zimbabwe que en Belgrado? En la Iglesia sólo hay una forma de hacer las cosas: bien, y cuando no se hacen bien, están mal hechas.

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