Al caer la tarde, durante la primera semana de la Gran Cuaresma nos reunimos para cantar las Grandes Completas con el Canon de San Andrés de Creta.
El cuerpo se revela por el ayuno recién comenzado, las pasiones pugnan por vencer al que inicia el camino que conduce a la Pascua.
Entramos en la iglesia ilumianda tan solo por la suave luz de las lámparas que arden anten los iconos. Nos postramos, creemos que no vamos a poder, quedan todavía cuarenta días de ayuno, de lucha... Y entonces el coro comienza a cantar: "Μεθ ημών ο Θεός" Porque Dios está con nosotrosy nada hemos de temer, porque Él es nuestro escudo, nuestra fuerza, el impulso que nos anima a seguir caminando, luz ue nos ilumina en las tinieblas. Nada temeré, porque Dios está con nosotros.
No hay comentarios:
Publicar un comentario