Mirad, vosotros que os aburrís, que decís que os cansa la Liturgia, que si no entendéis: NECIOS!!!
Cuando llegáis a la Iglesia y veis las cortinas cerradas, el sacerdote preparando la proscomidia está en la gruta de Belén donde nació el Cordero puro y sin mancha que quita los pecados del mundo....
Cuando se abren las puertas reales y el sacerdote sigue al diácono que lleva el libro de los Santos Evangelios, es Cristo que comienza su vida pública y su predicación del Reino.
Cuando el coro canta el himno de los querubines y es llevado el Cordero al altar, tiemblan los querubines al ver a Cristo que camina voluntariamente a su pasión salvadora.
Cuando se cierran las cortinas y una vela arde encendida ante ellas y se elevan las nubes del incienso perfumado: Misterio terrible, misterio inefable, se cumple el sacrificio del Calvario y el Espíritu Santo desciende como un fuego infinitamente mayor que el de Elías para transformar los dones en el Cuerpo y la Sangre de Cristo nuestro Dios que reposa sobre el altar como sobre el santo sepulcro.
Cuando las puertas reales se abren Cristo surge victorioso y se ofrece como verdadera comida, como verdadera bebida.
Necios, ignorantes e incrédulos!!! Participáis en los Divinos Misterios y estos os aburren; estáis en el sacrificio del Calvario y este os hastía.
Y vosotros los que os quedáis en vuestras casas, durmiendo mientras Cristo se ofrece en sacrificio, que duro será el día del juicio por ese desprecio.
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