miércoles, 31 de octubre de 2007

Los Santos Cosme y Damián



Estos Santos eran nativos de Asia, sus padres cristianos y excelentes esposos. Cuando su madre Theodoti enviudo, dedicó todo su esfuerzo en la educación cristiana de sus dos niños, Cosme y Damián. Los dos hermanos se distinguieron por su inteligencia y gran perseverancia, esto los ayudó a estudiar muchas ciencias. Particularmente se esforzaron a la ciencia médica, la cual ejercían como auxilio y caridad para los habitantes de la ciudad. Curaban las enfermedades particularmente a los pobres, sin cobrar, por eso los llamaban Anarguiri. Muchos de los pacientes que fueron curados deseaban agradecerles, pero ellos no aceptaron las gracias y contestaban con las palabras de la Santa escritura: “La alabanza, la gloria, la sabiduría, la acción de gracias, la honra, el poder y la fortaleza son de nuestro Dios por los siglos de los siglos. ¡Amén!" (Apocalipsis 7:12) Así humildemente sirvieron y ayudaron toda su vida a las personas necesitadas entregando sus espíritus pacíficamente.

lunes, 29 de octubre de 2007

Epilogo de la fiesta de San Crispín en Elche

Y algunos pensaron que la culpa de que no se celebrara ayer la Misa en la ermita de San Crispín de Elche la tienen "los rumanos". Pues no, ellos no tuvieron la culpa. La ermita estaba vacía de iconos y elementos de culto propios de nuestra Iglesia Ortodoxa según lo estipulado en el acuerdo con el Gremio de Zapateros, la culpa no fue de ellos. La ermita de San Crispín nunca ha dejado de ser un templo católico, era una iglesia cedida a los ortodoxos temporalmente hasta que ellos puedan tener su propio templo que no es cosa fácil. Sobra cualquier comentario más.

Diario "INFORMACIÓN" ed. ELCHE 29 de octubre 2007. M. J. SANMARTÍN: Los ilicitanos celebraron ayer San Crispín participando activamente en la romería acompañando al Santo en su recorrido por las calles del barrio o, como hizo una gran multitud La romería, que estuvo muy concurrida, partió a las 9.30 horas de la misma ermita y llevó al Patrón de los zapateros por diversas calles del barrio para volver al punto de partida. A su llegada a la ermita, no se celebró la tradicional misa por decisión del vicario episcopal, que consideró que el lugar no era el adecuado al estar dedicado al culto ortodoxo y el Santo se expuso directamente al público. La imposibilidad de celebrar la misa causó un pequeño revuelo provocado por alguno de los asistentes, que mostró en público su disconformidad e incluso culpó de ello «a los rumanos» ante el resto de personas que formaban cola para ver de cerca al Santo, según indico el presidente de la Asociación de Amigos de San Crispín, Tomás Mora, que tuvo que explicar personalmente a quienes lo requerían las circunstancias por las que no se ofició la misa. Pese a este incidente, el público abarrotó un año más la ermita para ver al Santo y hacerse con alguna de las típicas «chinchetas» que se utilizaban antes en el oficio zapatero y con uno de los cerca de 20.000 calendarios de bolsillo que repartió Además, la gente abarrotó todo el recinto en una soleada mañana y cumplió también con la tradición de almorzar y compartir la típica coca en familia o con amigos. El ambiente festivo lo completaban la gran cantidad de puestos que ofrecían desdes los típicos dulces propios de la romería hasta tapas elaboradas; además de las animadas tómbolas y una amplia oferta de bisutería y bolsos, entre otros artículos.

sábado, 27 de octubre de 2007

Parroquia Ortodoxa de Alicante Biserica Ortodoxa din Alicante: Y al fial se saldrán con la suya!!!

Parroquia Ortodoxa de Alicante Biserica Ortodoxa din Alicante: Y al final se saldrán con la suya!!!********************************************************************
Diversidad de criterios ha producido la negativa por parte del Obispado de que se celebre en el interior de la ermita de San Crispín la tradicional misa que se lleva a cabo el día de la festividad del patrón de los zapateros, el próximo domingo. La oposición, motivada según el vicario episcopal, por la apreciación de que dicho edificio es ahora un templo de la Iglesia Ortodoxa Cristiana, ha hecho que muchos ilicitanos no se expliquen la razón de tal prohibición. A la vista del acuerdo firmado en el 2006 entre sus propietarios, la Asociación de Industriales del Calzado de Elche (AICE) y el representante del culto ortodoxo, queda bien patente que la ermita sigue siendo católica, que se han celebrado desde entonces un buen número de actos litúrgicos como bodas, bautizos e incluso entierros, totalmente autorizados por el Obispado. y unicamente con la circunstancia de que se presta al culto ortodoxo siempre y cuando no se necesite para la comunidad católica.La edil de Fiestas, Blanca González, se mostró ayer a requerimiento de La Verdad un tanto dubitativa ante el inesperado problema, bastante sorprendida deque a estas alturas se haya suscitado esta cuestión. «Naturalmente respeto todos los criterios pero no dejo de reconocer que la ermita es propiedad de la Asociación de Industriales del Calzado, que se construyó para honrar a San Crispín, como así se ha venido haciendo» La edil destacó que sus propietarios «en ningún momento ha hecho dejación de su propiedad, sino hacer un favor a la comunidad ortodoxa, con las consiguientes puntualizaciones, que fueron aceptadas por el Obispado», manifestó.En cuanto a celebrar la misa en otra iglesia cercana o realizarla al aire libre, no se mostraba muy de acuerdo. «De todas formas -terminó diciendo-, será el Obispado quien tenga la última palabra y por parte nuestra siempre respetando todos los criterios». Dejar el temploMás claro y rotundo se mostraba Pedro Méndez, secretario de la patronal zapatera local, cuya junta aprobó en su día el acuerdo con la Iglesia Ortodoxa. «Considero un absurdo que no se permita la celebración de la misa en el interior de la ermita, que nunca ha dejado de ser católica. Fui yo quien redactó el documento en el que la Asociación cedía el uso del templo a los ortodoxos, siempre con la aquiescencia del Obispado, como un favor a la comunidad ortodoxa».Méndez añadió: «Puestas así las cosas, tendremos que decirles a los ortodoxos que abandonen la ermita, después de haber existido unas relaciones excelentes, pero en ningún caso sería la Asociación de Industriales quien hubiese roto tales lazos, ya que a pesar de la carta y manifiesto apoyo del Obispado para que llevásemos a cabo tal cesión , serían ellos los responsables de que se fuese todo al traste, y así, el próximo año, ya no habrá ningún impedimento, si es que ha partido de allí la idea, o en último caso, del vicario episcopal, que es quien ha prohibido la celebración de la misa en el interior del templo, que repito, sigue y seguirá siendo católico».

viernes, 26 de octubre de 2007

Problemas en Elche

Parroquia Ortodoxa de Alicante Biserica Ortodoxa din Alicante: Problemas en Elche
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La comunidad ortodoxa de la Parroquia de la protección de la Madre de Dios de Elche (Alicante) Pide nuestras oraciones en estos momentos tan difíciles y comprtometidos para ellos. La Parroquia esta situada en la ermita de San Crispín que no es propiedad del Obispado católico si no del Gremio de Zapateros de Elche. El P Macario realizó todas las gestiones necesarias para poder utilizar la ermita ya que el Gremio la usa sólo una vez al año. La ermita fue cedida para poder ser utilizada por la comunidad ortodoxa rumana de Elche. Este año el vicario episcopal se ha negado a mandar a un sacerdote católico para celebrar la misa de la festividad en la ermita aduciendo que ahora es un templo ortodoxo, cosa que no es cierta ya que sigue siendo una ermita católica sólo cedida a los ortodoxos. ¿Es esta la forma que tiene el Obispado de pagar al Gremio de Zapateros de Elche el hecho de haberles dejado la ermita a los ortodoxos (cosa que se hizo con el visto bueno del Ayuntamiento del anterior vicario episcopal), dejarlos sin misa en la ermita el día de su Santo Patrón? Si es así, estamos en las de siempre. Los grandes gestos y reuniones ecuménicas quedan muy bien como portada de revistas y webs pero lo que se agradecerían más son los gestos diarios no de ecumenismo si no de convivencia que creo que son los importantes. Hoy he estado en Elche en un concierto que se ha dado en el Gran Teatro dentro del Festival Medieval que se celebra en esta ciudad. En el trayecto desde la RENFE al teatro, en tres ocasiones he escuchado comentarios sobre este hecho que ha repercutido enormemente en una ciudad que tiene posiblemente la industria zapatera más importante de España, gracias al vicario episcopal ahora hay en Elche mucha gente en contra de los rumanos y de la comunidad ortodoxa de esta ciudad. ¿Habían pensado desde el Obispado católico en como podía repercutir esta decisión en los ilicitanos? Al final, siempre un poco más de lo mismo. El P Christian, el P Macario y todos los miembros de esta joven comunidad necesitan nuestras oraciones sobre todo para que esta desacertada decisión no les afecte desfavorablemente.
Desde Alicante tienen todo el apoyo mío y de la Parroquia.

P Nicolás y el Consejo Parroquial

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Periódico "LA VERDAD", ELCHE El Obispado no permite la misa de San Crispín en la ermita al ser ahora un templo ortodoxo El vicario propone que se haga un acto al aire libre pese a que la iglesia está libre de signos no católicos La patronal zapatera cedió el edificio hasta que la comunidad rumana construya el suyo propio La festividad se celebra el domingo 25.10.07 - GÓMEZ ORTS

El próximo domingo se celebrará la fiesta de San Crispín, patrón de los zapateros, con la consiguiente romería, que recorrerá a partir de las nueve y media de la mañana las calles de la barriada, y el porrate, con la instalación de puestos de venta y terrazas para degustar las viandas. Pero este año se presenta con una novedad importante e inesperada: no se celebrará la misa en la ermita ni parece ser que tendrá lugar en ningún otro lugar.Esta es la noticia proporcionó ayer el vicepresidente de la Asociación Amigos de San Crispín, Tomás Mora. Explicó que al solicitarle un cura al vicario episcopal, Vicente Martínez, para la celebración de la ceremonia religiosa, le manifestó «que la misa no podía celebrarse en el interior de la ermita al haberse transformado en un templo de la Iglesia Ortodoxa para la comunidad rumana».Le comentó que había dos posibilidades: «que se oficiase una misa de campaña, en el exterior, o bien en una parroquia cercana». Ante estas alternativas, «decidimos no celebrar la misa, pese a que la ermita, tal y conforme estaba previsto, había quedado totalmente limpia de cualquier signo ortodoxo». Sin más comentarios, El vicario episcopal confirmó la decisión del Obispado, motivada en el sentido de que «la ermita ha pasado a ser un templo ortodoxo cristiano y no puede realizarse por tanto, una misa católica en el interior». Al comentarle que el pasado año ocurría lo mismo, y que todo se había hecho con la aquiescencia del entonces vicario episcopal, y por tanto del Obispado, manifestó que la cosa partía de una cesión provisional, pero que «ahora es todo lo contrario, ya que son los ortodoxos los que ceden el templo. Las condiciones anteriores eran de provisionalidad y ahora se han convertido en algo fijo». Comentó que había compromiso por parte de la Iglesia Ortodoxa de construir un templo propio, y en cambio lo que han hecho «es colocar una página web en Internet proclamando la ermita de San Crispín como tal templo». Vicente Martínez añadió que no ve ningún problema en que se celebre una misa de campaña o que tuviera lugar en otra iglesia cercana, sin dejar de poner claro que «la decisión se toma por respeto hacia la Iglesia Ortodoxa». Antonio Galiana Maciá, presidente honorario de la Asociación de Industriales del Calzado de Elche (AICE), propietario de la ermita, y de Amigos de San Crispín, se mostró sorprendido por el desarrollo de los acontecimientos. Dejó claro que «en modo alguno puede considerarse como cesión de la Iglesia Ortodoxa a la Católica para celebrar la misa, sino todo lo contrario». Hizo referencia al documento firmado el 12 de diciembre de 2006 por él, como representante de la patronal zapatera y el padre Makarios (Eduardo Altet Amorós), en nombre de la Iglesia Ortodoxa de Elche.Usos y actividadesEn el mismo documento queda bien claro que la Iglesia Ortodoxa de Elche está interesada en utilizar la ermita cuando lo estime oportuno para la realización de sus celebraciones litúrgicas, «salvo cuando sea requerida por la Asociación de Industriales del Calzado de Elche o la Asociación Amigos de San Crispín, para uso y actividades». Se añade que por tal cesión no se abonará cantidad alguna en concepto de arrendamiento, aunque sí por los gastos de consumibles o de otro tipo que su uso origine, comprometiéndose la Iglesia Ortodoxa de Elche a cuidar de las instalaciones y reparar todo desperfecto que las mismas sufran por el uso que realice tal entidad. Cualquier obra o modificación requerirá la previa autorización de AICE.Galiana dejó bien claro que cuando lo desee alguna de las dos partes, el contrato se considerará extinguido y la Iglesia Ortodoxa de Elche dejará la ermita libre y en perfecto estado, sin que medie indemnización alguna, salvo que existieran daños materiales, que los costearía la parte que ha hecho uso. Antonio Galiana añadió que para llegar a tal acuerdo, a propuesta de Asociación Amigos de San Crispín, se puso en contacto con el vicario episcopal y con el alcalde, haciendo valer que en todo momento se dispondría de la ermita, totalmente despejada de cualquier signo ortodoxo, siempre que fuera necesario realizar cualquier acto católico como boda, bautizo o entierro, como así ha ocurrido. Recalcó que «por descontado, sigue siendo templo católico en simple cesión». También que prometió la otra parte a construir una iglesia para la comunidad ortodoxa en Elche.Para la firma del documento se realizó una reunión de la junta de AICE, en la que hubo pleno acuerdo favorable, con la susodicha aquiescencia del alcalde, y claro está, del vicario episcopal de entonces, José Antonio Valero

SFANTUL DIMITRIE CEL NOU BASARABOV, OCROTITORUL BUCURESTILOR


Biserica Ortodoxa din Alicante:


SFANTUL DIMITRIE CEL NOU BASARABOV, OCROTITORUL BUCURESTILOR


Unul dintre reprezentantii de seama ai vietii crestine, odraslit de fratii nostri romani care traiesc in sudul Dunarii, a fost Sfantul Dimitrie zis “cel nou” sau “Basarabov”, ale carui moaste se gasesc azi in catedrala patriarhala din Bucuresti. A trait in veacul al XIII-lea, deci in timpul “imperiului” de la Tarnovo, intemeiat de romani si de bulgari sub conducerea fratilor Petru si Asan. S-a nascut in satul Basarabov, asezat pe raul Lom, un afluent al Dunarii, in apropierea orasului Russe. Parintii lui erau oameni saraci, care nu l-au putut da la invatatura, de aceea, de mic a fost nevoit sa-si castige el insusi cele necesare traiului. Ani in sir a pascut vitele si oile taranilor din sat, pe colinele din preajma Dunarii si pe vaile inverzite ale raului Lom. Viata in mijlocul naturii a oferit tanarului pastor prilejul de a admira mereu frumusetile firii cele vazute, ajutandu-l sa iubeasca si mai mult pe Facatorul lumii vazute si nevazute. In duminici si sarbatori a luat parte alaturi de parinti si de ceilalti credinciosi, la slujbele savarsite in biserica satului, putand astfel sa asculte invataturile de viata indrumatoare ale Mantuitorului Iisus Hristos, ale Sfintilor Sai Apostoli si ale Sfintilor Parinti. Atmosfera de viata autentic crestina din familie, ca si invataturile pe care le auzea la biserica l-au facut sa fie bland si milostiv cu toti semenii sai. Postea si se ruga mereu, asa cum se cuvine unui adevarat crestin. Se ingrijea mult de cei saraci, carora le impartea o parte din hrana pe care o primea de la consatenii sai pentru paza vitelor.
Cunoscand pe unii calugari din manastirile din apropiere, a aflat de viata imbunatatita pe care o duceau acestia, departe de lume si de grijile ei. Pe masura ce crestea cu varsta si cu intelepciunea, s-a trezit in el dorul dupa viata monahala, desi practicase si pana atunci, poate fara ca sa-si dea seama, cele trei “sfaturi” cerute oricarui calugar: sfintenia vietii (fecioria), smerenia (ascultarea) si saracia. Drept aceea, intr-una din zile, a parasit lumea, cu toate ale ei, si “luandu-si crucea”, s-a calugarit intr-o manastire din apropiere. S-a asezat intr-o pestera, sapata in stanca, pe malul raului Lom. Acolo a petrecut ani in sir in post aspru, infranare si rugaciune, izolat cu totul de lume si chiar de ceilalti monahi. Nu se stie cati ani a trait in aceast pestera si nici cum isi agonisea cele necesare traiului, dupa cum nu se stie nici data trecerii sale la cele vesnice. De un lucru putem fi siguri: ca el a fost in permanenta o pilda vie de aleasa viata crestina pentru ceilalti calugari si pentru obstea cea mare a credinciosilor.
Se spune ca pe cand si-a simtit sfarsitul aproape, a venit pe malul Lomului si s-a asezat intre doua lespezi de piatra ca intr-un sicriu. Si astfel si-a incredintat sufletul lui Dumnezeu, fiind inconjurat in chip nevazut doar de sfintii ingeri.
Pe buna dreptate, una din cantarile bisericesti din ziua praznuirii sale ii infatiseaza viata prin aceste cuvinte: “Ca un inger pe pamant viata ta ai savarsit, in post si rugaciune ziua si noaptea petrecand, ca sa infrangi pornirea ispitelor cu care te-ai luptat, ca un ostas adevarat al lui Dumnezeu, a carui voie ai implint din tinerete si toate intunecimile le-ai socotit. Pentru aceasta si noi cu credinta te laudam si te slavim”. (Podobia la Utrenie).
Multi ani nimeni n-a stiut de trecerea la cele vesnice a lui Dimitrie. Dar in urma unor ploi puternice, au cazut in apa Lomului si cele doua lespezi de piatra in care era adapostit trupul Cuviosului pusnic. Aceasta a fost acoperit de nisip si de prundis, ramanand iarasi o bucata de vreme nestiut de nimeni in alba raului Lom. Ele n-au fost insa atinse de putreziciune, pentru ca sa fie scoase apoi la lumina in chip minunat, prin lucrare dumnezeiasca. Intr-o noapte, Cuviosul Dimitrie s-a aratat in vis unei tinere care suferea de o boala grea, careia i-a spus ca daca parintii ei il vor scoate din apa, va fi tamaduita de boala. Tanara a povestit parintilor visul ei si impreuna cu acestia si cu alti credinciosi din sat s-au indreptat spre locul pe care insusi cuviosul il aratase in vis acelei tinere. De fapt, acolo se si arata adeseori o lumina mai presus de fire. Si cautand cu staruinta au aflat cinstitul trup al Cuviosului Dimitrie intreg si neputrezit. Binecredinciosii crestini din satul Basarab, impreuna cu preotii satului, au dus cinstitele moaste in biserica satului. Tanara bolnava, atingandu-se de ele, si-a recapatat de indata sanatatea.
Vestea despre aflarea cinstitelor sale moaste s-a raspandit curand atat in localitatile din sudul Dunarii, cat si in cele din nordul ei. Numerosi credinciosi de pe ambele sale maluri se indreptau spre satul Basarab pentru a se inchina cinstitelor moaste si a cere marelui sfant ajutor si mijlocire in fata Parintelui ceresc. Se implineau astfel cuvintele Sfantului Apostol Pavel care scria corintenilor ca “Dumnezeu a ales pe cei nebagati in seama ai lumii acesteia ca sa biruiasca pe cei tari, a ales pe cei de jos ca sa rusineze pe cei trufasi” (I Corinteni 1, 27-28). Dumnezeu l-a ales tocmai pe acest Dimitrie, smerit pastor si apoi pusnic, neluat in seama de nimeni, ca el sa fie cunoscut apoi de toti si sa-i ceara ajutor si ocrotire in nevoi. S-a invrednicit si el de aceeasi cinstire ca si pastorul Amos care a ajuns prooroc, ca si David care din pastor a ajuns rege in Israel, ca si pastorii din jurul Betleemului care au aflat de nasterea dumnezeiescului Prunc si au venit sa I se inchine. Traditia spune ca unul din domnii Tarii Romanesti a ridicat in satul Basarab o biserica noua, in care au fost asezate moastele Sfantului Dimitrie cel Nou, spre a fi cinstite de credinciosii care se indreptau mereu spre satul in care vazuse lumina zilei.
Moastele noului sfant al lui Hristos au ramas acolo aproape cinci secole. Intre anii 1768-1774 a avut loc un razboi nimicitor intre rusi si turci, purtat si pe pamantul romanesc, dar si in sudul Dunarii, pe teritoriul fostului stat bulgar, desfiintat de turci inca de la sfarsitul veacului al XIV-lea.
Generalul rus Petru Saltacov a ajuns cu ostile sale in satul Basarab. Pentru ca cinstitele moaste sa nu fie profanate de ostasii turci musulmani, generalul a poruncit ca ele sa fie duse in Rusia. Ajungand cortegiul cu racla in Bucuresti, un negustor bogat cu numele Hagi Dimitrie, se pare un macedoroman, precum si mitropolitul Grigorie II al Tarii Romanesti, au rugat pe generalul rus sa lase cinstitele moaste ale Sfantului Dimitrie cel nou poporului roman si Mitropoliei tarii, ca o mangaiere pentru multele pagube materiale si suferinte indurate de romani in cursul acelui razboi, mai ales ca era “valah” de neam. Ascultandu-le dorinta, moastele au fost asezate cu mare cinste in catedrala mitropolitana din Bucuresti in iulie 1774. Mana dreapta a Sfantului a fost trimisa, totusi, la Kiev, unde se crede ca se pastreaza si astazi.
In felul acesta, Sfantul Dimitrie cel nou sau Basarabov a devenit ocrotitorul Bucurestiului si al intregii Tari Romanesti. Multe suferinte si felurite boli au fost vindecate in urma rugaciunilor staruitoare in fata cinstitelor moaste ale Sfantului Dimitrie. In vreme de seceta s-au facut cu ele procesiuni pentru ploaie. An de an zeci de mii de credinciosi din Capitala tarii noastre sunt prezenti la slujba pomenirii sale, care se face in ziua de 27 octombrie. Tinand seama de cinstirea deosebita de care se bucura Sfantul Dimitrie cel nou, mai ales in Bucuresti, la 28 februarie 1950 Sfantul Sinod a hotarat generalizarea cultului sau in toata Biserica Ortodoxa Romana. Aceasta hotarare s-a transpus in fapta in cadrul unor impresionante manifestari bisericesti la 27 octombrie 1955, in prezenta multor ierarhi romani si straini si a numerosi preoti, calugari si binecredinciosi crestini din Bucuresti si din alte localitati din tara.
De atunci, evlavia credinciosilor romani fata de acest Sfant odraslit din neamul nostru a sporit si mai mult. Chipul sau este zugravit in icoane, dar si in biserici, iar slujba si Acatistul lui au fost tiparite in mai multe randuri.
Sa ne rugam si noi Sfantului Dimitrie cel nou sa fie ocrotitor in necazuri, izbavitor de boale si alte suferinte, mangaietor in intristare si grabnic ascultator cand ne rugam cu staruinta ca sa fie mijlocitor al nostru catre Hristos Domnul. Sa incercam sa fim si noi mai blanzi si smeriti cu inima, milostivi, iertatori si plini de dragoste fata de aproapele, asa cum a fost el insusi.
Drept aceea, sa-i cantam: “Auzit-am, Sfinte Parinte, de viata ta cea dumnezeiasca; vazut-am si minunile tale si, indulcindu-ne de facerile tale de bine ce ne arati in toata vremea, credem in indraznirea ta catre Dumnezeu, pentru care graim tie, unele ca acestea:
Bucura-te, doctor iscusit la bolnavilor;Bucura-te, izbavirea indracitilor;Bucura-te, intarirea batranilor;Bucura-te invatatorul tinerilor;Bucura-te, mangaietorul celor intristati;Bucura-te grabnic ascultator al celor ce se roaga;Bucura-te izbavitorul celor ce sunt in primejdii;Bucura-te, noule invatator al vietii celei curate;Bucura-te, facatorule de minuni, Sfinte Parinte Dimitrie!”(Din Acatistul sau, icosul 4).

miércoles, 24 de octubre de 2007

26 de Octubre, Fiesta del Gran Mártir San Demetrio de Tesalónica


Tropario tono 4º

El mundo te ha contemplado en las aflicciones,
oh Portador de la Pasión
como guerrero que vence a las naciones.
Dominaste el orgullo de Lyaeus
y en la batalla sostuviste el valor de Nestor.
Ruega a Cristo nuestro Dios, oh San Demetrio,
para que nos conceda su gran misericordia

Gran Mártir San Demetrio de Tesalónica, el emanador de miro


El gran mártir San Demetrio nació en la ciudad de Solún, Grecia. Sus padres, quienes practicaban el Cristianismo en secreto, lo bautizaron y le enseñaron la religión. Su padre, procónsul romano, falleció cuando Demetrio era mayor de edad. El emperador Maximiano (s. IV) nombró a Demetrio gobernador y militar de toda Tesalónica.La principal función de San Demetrio era defender la provincia de los enemigos, obligándolo el emperador a que exterminara también a los cristianos. Demetrio en lugar de esto comenzó a eliminar las costumbres paganas y a los paganos los convertía a la fe cristiana. Pronto llegó a oídos del emperador que el procónsul Demetrio era cristiano; y sabiéndolo Demetrio, se preparó para la muerte, repartió sus pertenencias a los pobres, haciendo una vida de ayuno y penitencia. El emperador recluyó al procónsul y comenzó a distraerse con escenas de gladiadores y circos, donde llevaba a la arena a los cristianos. El conocido gladiador Liaco fácilmente dominaba a los sumisos cristianos en las luchas y ante la exaltada multitud los arrojaba sobre las lanzas de los guerreros. El joven cristiano San Néstor, visitó a San Demetrio en el cautiverio y San Demetrio lo bendijo para un combate cuerpo a cuerpo con Liaco. Reforzado por Dios, San Néstor venció al orgulloso gladiador. En cuanto Maximiano conoció la razón por la que Néstor había ganado , ordenó que San Demetrio fuera traspasado con las lanzas de sus celadores, y que San Néstor fuera decapitado con su propia espada. El cuerpo del gran mártir San Demetrio fue arrojado como alimento para las bestias, pero los pobladores lo sepultaron en secreto. El sirviente de San Demetrio tomó su ensangrentada túnica y el anillo, y con ellos comenzó a hacer milagros. A él también lo martirizaron. Durante el gobierno del emperador Constantino el Grande (324-337) ante la tumba del mártir San Demetrio fundaron un templo y a los 100 años fueron encontradas sus santas reliquias. Ante el sepulcro del gran mártir San Demetrio desde entonces se postran los cristianos ortodoxos pidiéndole que libre a la Santa Iglesia de todos sus enemigos. Durante el gobierno del emperador Mauricio (582-602) los avaros, que vivían a las riveras del Don, tomaron la ciudad de Solún. San Demetrio apareció sobre el paredón de la ciudad, y un ejército de cien mil personas huyeron. En otra oportunidad el Santo salvó del hambre a la ciudad. La biografía de san Demetrio dice que liberaba reclusos de las manos de los contrarios y les ayudaba a llegar hasta Solún.Desde el siglo VII junto a sus reliquias comenzó a fluir una aromática y milagrosa mirra, lo cual se divulgó en esa época. En el siglo XIV Demetrio Jrisolog escribió acerca de esa mirra: "por su composición no es agua, es más espesa y eso no se parece a ninguna sustancia conocida por nosotros... Es sumamente aromática no solo de lo que conocemos como artificial sino en relación a todo lo creado por Dios." Por esta razón al gran mártir Demetrio lo llamaron "Emanador de mirra."

Sfântului slavitului Marelui Mucenic Dimitrie (Dumitru), izvorâtorul de mir si facatorul de minuni, din Tesalonic.


Acesta a fost pe vremea împaratilor Diocletian si Maximian (284-305), tragându-se din Tesalonic, fiind din început evlavios si învatator al credintei celei în Hristos. Deci mergând Maximian la Tesalonic a fost prins sfântul si pus în temnita, pentru ca era vestit în dreapta credinta. Si laudându-se împaratul cu un om al lui ce-l chema Lie si îndemnând pe oamenii cetatii sa iasa sa se lupte cu el, caci întrecea acesta pe toti cei de vârsta lui la marimea trupului si la putere. Un oarecare tânar crestin anume Nestor, mergând la Sfântul Dimitrie unde se afla în temnita, îi zise: "Robule al lui Dumnezeu, vreau sa ma lupt cu Lie; roaga-te pentru mine". Iar sfântul însemnându-l la frunte cu semnul crucii, îi zise: "Si pe Lie vei birui si pentru Hristos vei marturisi". Deci luând Nestor îndrazneala din cuvintele acestea, merse de se lupta cu Lie si-i puse semetia lui jos, omorându-l. De care lucru împaratul rusinându-se, s-a mâhnit si s-a mâniat. Si fiindca s-a aflat ca Sfântul Dimitrie a îndemnat la aceasta pe Nestor, a trimis ostasi si le-a poruncit sa-l strapunga cu sulitele pe sfântul în temnita. Pentru ca a fost pricina înjunghierii lui Lie si facându-se aceasta, îndata marele Dimitrie si-a dat sufletul în mâinile lui Dumnezeu, facând dupa moartea sa multe minuni si uimitoare tamaduiri. Apoi din porunca împaratului s-a taiat si capul Sfântului Nestor. Asadar, zacând trupul sfântului mort pe pamânt, au luat apoi niste crestini cinstitele lui moaste si le-au îngropat cu cinste si cu dragoste dumnezeiasca. Iar o sluga a sfântului ce-i slujea, când a primit sfântul fericita junghiere, el precum a putut a strâns sfintitul sânge al mucenicului, în sfântul orar ce-l purta sfântul pe umere, înca si inelul sfântului ce-l purta în mâna sângerându-l cu mucenicescul sânge, multe minuni a facut cu el, încât s-a umplut toata cetatea tesalonicenilor de vestea minunilor. Drept aceea nici era cu putinta a se ascunde aceasta de Maximilian, nici el a suferi zavistia; ci au prins numaidecât pe acea minunata sluga, care se chema Lupul si l-au omorât. Deci trecând câtava vreme si înmultindu-se minunile si ajungând în toate partile, un om oarecare anume Leontie, foarte de cinste si cu caldura spre credinta în Hristos, a cazut într-o boala foarte grea, cât socotea mai de dorit moartea si neputând doctorii nimic a-i folosi si boala tot întarindu-se, a nazuit la sfânta biserica a mucenicului, si îndata cum l-au dus si l-au pus acolo si el chemând numele sfântului prin buzele sale, lesne s-a tamaduit de acea boala. Si precum Leontie curând îsi lua tamaduirea, asa fara de zabava precum a putut a dat rasplatirea. Ca a stricat locasul cel mic unde era trupul sfântului, fiind foarte strâmt din pricina zidului baii si a ulitei. Si a zidit din temelie locas mai mare în cetatea Tesalonicului, care sta pâna astazi foarte cuvios în fata ulitei celei mari, unde este baia cea de obste. Deci vrând acest iubitor de credinta om, ca sa mearga la Iliric unde avea si dregatoria de guvernator si vrând el sa ia oarece parti din sfântul trup, ca sa zideasca si acolo biserica sfântului mucenic, a fost oprit de la ce voia sa faca, prin aratari de noapte, pentru ca nu luase voie de la sfântul. Pentru aceasta a facut a doua calatorie, precum se spune, si luând haina mucenicului ce era rosita de sfântul lui sânge si o parte din orar, si punându-le într-un sicriu de cinste, pe cele ce erau cu adevarat cinstite, într-acest chip a împlinit dorinta mucenicului si apararea sa. Deci vrând a-si face calea catre Sirmium în vreme de iarna si sosind la tarmurile apei Istrului si venind apa foarte mare, era în mare mâhnire. Iar Sf. Dimitrie aratându-i-se i-a zis: "Sa nu ai nici o grija, ci tine în mâini cele ce duci si treci fara de nici o îndoiala râul". Si a ascultat guvernatorul pe cel ce i se aratase si dimineata suindu-se în car a trecut apa tinând sicriasul în mâini; iar apa îi facea loc si curgea cu liniste. Deci asa trecând fara de nici o vatamare si sosind la Sirmium a asezat acest sfânt sicriu cu odorul ce era în el în biserica ce zidise mucenicului. Si multi s-au bucurat de multele minuni si tamaduiri ce facuse acea sfânta hlamida, înca si pe cale. Si pe Marian guvernatorul ilirienilor, care era cuprins de o boala rea din cap pâna la picioare, parasindu-l doctorii si mergând la biserica sfântului, precum îi poruncise sfântul, i-a izbavit de acea boala. Si pe alt om ce avea boala de curgerea sângelui, l-a tamaduit minunat si pe altul ce era demonizat, înca si cetatea cea mare a Tesalonicului a izbavit-o de împresurarea barbarilor si a scos-o din robia lor. Si pe episcopul afrorilor (pe care îi socotesc elinii mutati din Fenicia), care fiind robit de catre barbari l-a izbavit, aratându-i-se sfântul si slobozindu-l din legaturile ce avea împrejur, l-a îndreptat pâna la Tesalonic. Iar daca s-a dus episcopul în Africa, a zidit o biserica Marelui Mucenic Dimitrie, silindu-se înca sa-i faca si un chivot si un amvon, iar sfântul neîntârziind, ci aratându-se episcopului în vis, i-a zis: "Ia aminte, corabia ce a sosit acum la liman a adus marmore câte îti trebuie, si din acelea sa iei pentru acea trebuinta"; deci vorbind episcopul cu corabierul si neizbutind, i s-a aratat iarasi sfântul si i-a zis: "Ca la vârful corabiei zaceau marmorele", spunându-le tot anume cum si în ce fel de forma erau si cum ca le cumparase pe numele fratelui sau si împreuna-mu-cenicului Victor, si cum ca acela i le-a daruit acum fiind pentru el altele la Constantinopol de i s-a împlinit trebuinta si sa spuna aievea corabierului în acest chip, ca asa îl va pleca si le va lua, precum a si fost. În cetatea Tesalonicului a potolit foametea si moartea ce era, înconjurând pe la limanuri si aratându-se corabierilor, le-a poruncit sa porneasca cu corabiile cu bucate acolo degrab, aratându-se atunci si aievea, de-l vedeau corabierii cu ochii si mergea sfântul departe înaintea corabiilor, umblând pe mare. Pururea pomenitul împarat Iustinian, a zidit acel de Dumnezeu facut si fara cusur lucru, în numele adevaratei întelepciuni a Cuvântu-lui lui Dumnezeu si cauta sa ascunda acolo toate cele de demult vechi si cinstite lucruri si pof-tind sa i se aduca acolo si vreo particica din moastele Sfântului Marelui Mucenic Dimitrie, si pornindu-se spre acel lucru cei trimisi de dânsul si apropiindu-se de mucenicescul si de Dumnezeu cinstitul mormânt al mucenicului, îndata se arata unde stralucea foc de la cinstitul sicriu si sarea de acolo vapaie de foc de-i lovea în gura si nu-i lasa sa se apropie, si glas din foc iesind si povestind acel înfricosator si minunat lucru zicea: "încetati de a mai încerca"; de care îngrozindu-se, au cazut cu fata la pa-mânt si luând numai tarâna de acolo, s-au dus. Din care, jumatate au pus-o ca un odor în camera odoarelor, iar jumatate au trimis-o la împarat pentru sfintenie, povestindu-i cele ce li s-a întâmplat si ce li s-a grait. Iar diavolul cel ce pururea pizmuieste cele bune, a ispitit oarecând sa dea marea cetate a Tesalonicului în mâinile vrajmasilor în acest chip: a uneltit ca sa arda chivotul sfântului în biserica, si aprinzându-se biserica de ardea, a sosit si neamul cel fara de omenie al slavinilor, si a ascuns oastea putin în laturi de la cetate. Iar poporul strângându-se ca sa stinga focul, cel ce era purtator de grija de lucrurile cele sfinte ale bisericii, vazând ca argintul sicriului se topise de curgea pe pamânt, s-a temut sa nu se faca vreun jaf, sa piara argintul de popor, deci striga cu glas mare zicând: "O, prietenilor si fratilor, vrajmasii au împresurat cetatea si au început a sfarâma zidurile" si se mestesugia el cu cuvântul lui ca sa risipeasca multimea oamenilor si sa nu jefuiasca argintul, caci sfântul daduse insuflarea aceasta. Crezând cuvântul aceluia, precum si era de crezut si pornindu-se toti numaidecât la ziduri au aflat pe vrajmasi punând scarile la ziduri si maiestriile cele de stricaciunea cetatii si pe cei ce dadusera navala asupra cetatii numai putin decât focul; deci chemând pe sfântul în ajutor, i-au alungat. Iar dupa ce s-a stins si focul, pazitorul acela al bisericii, a spus catre toti minunea, zicând: Ca strigarea aceea ce facuse, nu era doara ca stia el ceva de venirea vrajmasilor, ci numai pentru paza sfântului, ca sa nu se jefuiasca argintul de popor. Care este aratata la cei chibzuiti, care stiu socoti lucrurile si cunosc dumnezeiestile rânduieli, ca cu pronia sfântului întorcând la capul vrajmasului mestesugurile lui, se tamadui raul cu rau, caci cu aprinderea focului a atâtat poporul si cu stingerea l-a întarit, iar cu glasul cel de mântuire, care s-a dat din dumnezeiasca insuflare pazitorul bisericii le-a strigat si fiind poporul înfierbântat a mântuit si zidul si cetatea foarte usor. Asijderea si un oarecare Ilustrie, ce se zice pe limba greaca protospatar, sezând lânga biserica sfântului, dumnezeiesc om se cunostea a fi. Acesta spunea, ca pe vremea razboiului cu avarii, când împaratia Mavrichie, a vazut doi barbati luminosi la chip si la stat, ca cei ce sunt în cinste si stau înaintea fetei împaratului, care mergeau sa intre în biserica sfântului si când au fost la locul ce se cheama Trivolon, de unde se începe a intra în biserica, între cei doi stâlpi mari de tetalie, ce stau spre apus, au zis slugii sa-i duca la domnul casei, si apropiindu-se el de intrarea sfântului chivot, iar sfântul degrab a deschis usile si a iesit de i-a întâmpinat si le-a dat închinaciunea sanatatii ca unor cunoscuti si veniti de la împaratul si facând voia împaratului, iar si au grait catre dânsul, zicând: "Ca împaratul a poruncit sfintiei tale sa lasi cetatea si sa mergi catre dânsul, ca s-a lasat vrajmasilor cetatea aceasta". Daca a auzit sfântul acest lucru a plâns, plecând capul, fiind cuprins cu tacere, multa vreme, arata cu chipul acesta greutatea mâhnirii ce-i dadusera cuvintele acelea, de care mâhnindu-se si sluga, a zis: "De as fi stiut, fratilor, ca va aduce venirea voastra atâta amaraciune, nu as fi spus domnului meu". Si dupa aceea târziu i-a întrebat sfântul: "Adevarat, asa a placut? Asa s-a parut Domnului si Stapânului tuturor? Sa paraseasca o cetate atât de mare, pe care a cumparat-o cu Sângele Sau si sa o dobândeasca cei ce nu-l cunosc?" Si ei au zis: "Asa, adevarat". Iar sfântul si mult-milostivul mucenic, i-a tocmit si i-a învatat sa duca raspunsul la Domnul si Stapânul tuturor, care era în acest chip: "Cunosc, iubitorule de oameni, Doamne, milosârdiile Tale, cele ce biruiesc pururea mâhnirea Ta, pe care o atâta pacatele noastre; cunosc ca Ti-ai pus sufletul pentru pacatosi si Ti-ai varsat sângele pentru ei, si nu s-a zaticnit niciodata aceasta buna voie a Ta si de pacatele noastre, si de vreme ce m-ai pus si pe mine pazitor acestei cetati, ma voi asemana Tie, Stapânului meu, si-mi voi pune sufletul pentru dânsii si voi pieri cu pieritorii acestia, ce cred în numele Tau. Si nu s-au despartit de la Tine, macar ca au gresit, iar Tu esti Dumnezeul celor ce se pocaiesc". La acestea, barbatii aceia zisera: "Acestea sa spunem celui ce ne-a trimis? Acestea sa zicem împaratului? Frica ne este sa nu cumva sa se mâhneasca asupra ta"; iar sfântul a zis: "Acestea sa le zica si iara sa le zica, si s-a întors iarasi la Chimitirion si închise sfântul chivot înaintea celor cu chip îngeresc, care purcesera de se dusera dupa vorba aceasta". Acestea le adeverea sfintitul Ilustrie, ca le vazuse aievea întru uimire; sau vedenie si povestindu-le cetatenilor, ce mai ramasesera, le da îndraznire cu cuvântul, ca erau îngroziti si slabiti pentru boala omorului ce se întâmplase mai înainte, aflându-se la multa neputinta si la lipsa de prada si calcarea limbilor, si-i îmbuna, ca este sfântul într-ajutor cu dânsii si-i adeverea ca vor fi paziti cu rugaciunile sfântului, precum mai pe urma sfârsitul lucrurilor a aratat. Iarasi un eclesiarh anume Onisifor, pazind la sfântul mormânt si se ostenea la aprinderea candelelor si a facliilor si fiind rau cu naravul, ca fura lumânarile si facliile; si facând aceasta multa vreme, n-a lasat sfântul netamaduit naravul lui cel nepriceput si de stricaciune, si aratându-i-se în vis, l-a mustrat si l-a învatat cu binisorul ceea ce se cadea sa faca, zicându-i: "Frate Onisifore, nu-mi place ce faci la faclii; ci sa stii ca facând aceasta si pe cei ce le aduc pagubesti mult, si însuti pe tine te-ai împins în prapastia pierzarii. Caci cu cât se aprind mai mult facliile, se milostiveste si Dumnezeu mult spre cel ce le aduce; iar când se iau curând, micsoreaza lucrul mila aceluia si sporeste osânda celui ce le ia". Deci oprindu-se Onisifor putin dupa cuvintele acestea, peste putina vreme iar lasându-se de îmblânzirea vedeniei, s-a apucat iarasi de cele obisnuite si le facea fara de frica. Si într-o zi, mergând un crestin foarte de noapte a dus faclii foarte frumoase, care au placut lui Onisifor si îndata cum le-a aprins a mers sa le ia, dupa ce plecase cel ce le adusese. Însa vezi si grija sfântului: cum se întinse acela la faclii, sfântul înca slobozi glas din sicriu, zicându-i: "Dar nu te-ai mai lasat?" într-acest chip lovindu-se Onisifor, a cazut la pamânt cadere grea, îngrozindu-se de frica si de sunetul glasului, pâna a venit un cleric cunoscut al lui, de l-a ridicat de jos si l-a tinut de si-a venit în fire; si dupa ce si-a venit în fire, si-a marturisit catre toti îndraznirea nebuniei lui si purtarea de grija a sfântului, cu cea dintâi si a doua certare cu iubire omeneasca, încât nu numai el, ci si altii toti se folosira de minunea aceasta.

viernes, 19 de octubre de 2007

21 de octubre: 6° Domingo de Lucas

En la lectura evangélica de hoy, Cristo se presenta como libertador de las potestades demoníacas, que retienen al ser humano cautivo y lo tienen totalmente dominado. A este acto benéfico de Dios observamos la respuesta del endemoniado que fue liberado. Después de su encuentro con el libertador y salvador Cristo, se transforma radicalmente, el desnudo se viste, el hombre alocado se presenta ahora cuerdo. El hombre antisocial, que vivía en los sepulcros y en los desiertos, se encuentra ahora comunicado con sus semejantes. En el lugar de la agresividad y de la manía destructora que mostraba, se dirige a sus amigos y conocidos y les cuenta de su milagrosa curación. De esta manera se destaca la sociabilidad del ser humano y en especial del cristiano. La sociabilidad es una característica esencial de la naturaleza humana. Es cierto que otros seres vivos presentan cierta sociabilidad, pero esta se diferencia cualitativamente de la sociabilidad humana. Es menos perfecta y se manifiesta sólo en el plano horizontal, es decir, en la comunicación entre seres vivos. Contrariamente, la sociabilidad humana es más perfecta y se desarrolla también en el plano vertical, como religiosidad, es decir, como la comunicación de los humanos con Dios. Entonces, la religiosidad, como característica particular del ser humano, presenta una nueva dimensión en su sociabilidad. “aquel que camina por el sendero de la virtud, no se satisface hasta que consiga compañeros”, decía un filósofo. La sociabilidad del ser humano se manifiesta como superación de su individualidad. La reclusión del ser humano en sí mismo, impide el desarrollo de la sociabilidad así como de la religiosidad. La superación de la individualidad se realiza con el amor a Dios y al prójimo. El amor traspasa los límites del individuo. El individuo se transforma en persona que viene a encontrar a la otra persona humana con respeto y amor. El cristiano es el ser sociable por excelencia, pero también es el ser antisocial por excelencia. Es antisocial porque niega al mundo y las cosas del mundo, para entregarse a Dios. Pero es sociable también, porque en Dios y con Dios encuentra el verdadero amor y la sociabilidad con todo el mundo. Así como Cristo, el creyente se convierte en el prójimo para cada ser humano, incluso para su enemigo. El creyente se convierte en foco de salvación para su semejante. La fe que no tiene las proyecciones que dicta el amor, es una fe teórica y por ello, muerta. El cristiano no puede sentirse contento cuando está encerrado en sí mismo y no puede ver las necesidades de su hermano. La auténtica sociedad humana se desarrolla sobre el prototipo de la Santa Trinidad. Cada persona de la Santa Trinidad, no tiene una parte de la naturaleza divina, sino que es Dios perfecto y tiene toda la divinidad. Así también, cada persona humana verdadera, no tiene una parte de la naturaleza humana, sino que es un ser humano perfecto que posee toda la humanidad. A pesar de la insondable diferencia que existe entre Dios y el ser humano, Dios Trinitario se proyecta en la Iglesia como el modelo para toda la humanidad y para cada ser humano en particular. El prototipo trinitario encuentra su aplicación en la Iglesia. La Iglesia, como escribe san Máximo Confesor, es modelo e imagen de todo el mundo. Ello revela, no sólo el lugar de los cristianos en la sociedad, sino también la misión de la Iglesia en el mundo. A pesar de ello, los seres humanos, incluso los cristianos, mantienen enemistad y proyectan en sus enemigos sus propias debilidades y maldades. De esta manera justifican el odio que siente contra ellos, mientras se consideran inocentes eximiéndose de toda responsabilidad. La Iglesia llama al creyente a un movimiento opuesto. Lo llama a que vea la maldad o la debilidad del otro como propia y a que la combata dentro de sí mismo. Es más, lo llama a combatir dentro de sí mismo sus propias maldades y debilidades. El creyente debe tener el corazón puro y debe ver a los demás como personas buenas. Los pensamientos que cultiva uno sobre los demás, revela su propio ser. Y, de la forma en que se coloca frente a sus semejantes, se puede conocer su propia situación espiritual.

Fiesta del Santo Evangelista Lukas y de San Juan de Rila



Este próximo fin de semana celebraremos la fiesta del Santo Evangelista Lukas y de San Juan de Rila. La celebrción de la Traslación de las Reliquias de San Juan de Rila es fiesta muy epecial e importante para todos los miembros búlgaros de la Parroquia y les acompañamos en la memoria de este gran Santo de la Ortodoxia pidiendo por su nación, por sus gobernantes y por todos los búlgaros. Así mismo esta semana hemos celebrado la fiesta del Evangelista Lucas por lo que veneraremos su Santa Reliquia tanto en la Vecernia como en la celebración de la Divina Litugia.


Fiesta de la Traslación de las Reliquias de nuestro Padre San Juan de Rila, Protector de Bulgaria

Tropario tono 1º

Fundamentado en el arrepentimiento, oh Padre venerado,
tu vida era igual a la de los ángeles
siendo ejemplo de ternura
y modelo de paciencia y perfección espiritual.
Ruega por nuestras almas a Cristo Dios
al que suplicabas en tus oraciones con ayunos y lágrimas.
Тропар, глас 1
Покаяния основание, прописание умиления, образ утешения, духовнаго совершения равноангельное житие твое бысть, преподобне. В молитвах убо и в пощениих и в слезах пребывавый, отче Иоанне, моли Христа Бога о душах наших.
Oснова на покаяние, пример на умиление, образец на утешение и на духовно съвършенство бе твоят равноангелски живот, преподобни, като си пребивавал в молитви, постничество и сълзи. Oтче Иоане, моли Христа Бога за нашите души!
Кондак, Глас 8

Kато си поревнувал ангелско житие, преподобни, ти си оставил всичко земно и си се притекъл към Христа! Ограждайки се с неговите заповеди, ти си станал стълб непоколебим от нападенията на врага. Заради това ти викаме: радвай се, отче Иоане, светило пресветло!

domingo, 14 de octubre de 2007

Bienaventurada Madre Nuestra

Muchos son los que en el día de hoy han pasado por la parroquia para celebra la fiesta de nuestra Bienventurada Madre Santa Paresqueva. Hoy la Iglesia se nos ha quedado pequeña, rumanos, griegos, búlgaros y españoles alrededor del icono de una de las Santas más veneradas por la Ortodoxia. Se ha comentado los cerca de dos millones de personas que hoy en Iasi habrán venerado sus Santas Reliquias junto a la mano de San Juan Crisóstomo. Haciendo referencia al Evangelio de este domingo, el corazón de Santa Paresqueva fue esa tierra buena donde fue sembrada la Palabra de Dios "El que quiera seguirme cargue con su cruz..." Delante se sus Reliquas en Iasi, en cientos de Iglesias de toda la Ortodoxia, en nuestra pequeña parroquia de Alicante, hoy millones de fieles habrán puesto sus oraciones en las manos de Santa Paresqueva con la confianza de que ella las presentará ante Cristo. Emoción y lágrimas en muchos ojos al besar su Icono. Que ella interceda por todos nosotros y nos ayude a ser cada día tierra buena donde la semilla del Evangelio de fruto abundante.

sábado, 13 de octubre de 2007

Domingo del VII Concilio Ecuménico

Entrando, como si dijéramos, por el camino real, siguiendo la enseñanza divinamente inspirada de nuestros Santos Padres, y la tradición de la Iglesia Católica - pues reco­nocemos que ella pertenece al Espíritu Santo, que en ella habita -, definimos con toda exactitud y cuidado que de modo semejante a la imagen de la preciosa y vivificante cruz han de exponerse las sagradas y santas imágenes, tanto las pintadas como las de mosaico y de otra materia conveniente, en las santas iglesias de Dios, en los sagrados vasos y ornamentos, en las paredes y cuadros, en las casas y caminos, las de nuestro Señor y Dios y Salvador Je­sucristo, de la Inmaculada Señora nuestra la santa Madre de Dios, de los preciosos ángeles y de todos los varones santos y venerables. Porque cuanto con más frecuencia son contemplados por medio de su representación en la imagen, tanto más se mueven los que éstas miran al recuerdo y deseo de los originales y a tri­butarles el saludo y adoración de honor, no ciertamente la latría verdadera que según nuestra fe sólo conviene a la naturaleza di­vina; Sino que como se hace con la figura de la preciosa y vivifi­cante cruz, con los Evangelios y con los demás objetos sagrados de culto, se las honre con la ofrenda de incienso y de luces, como fue piadosa costumbre de los antiguos. "Porque el honor de la imagen, se dirige al original" (Cf. S. Basil., De spiritu Sancto 18, 45 [PG 32, 149 c]), y el que adora una imagen, adora a la persona en ella representada.

Porque de esta manera se mantiene la enseñanza de nuestros santos Padres, o sea, la tradición de la Iglesia Católica, que ha recibido el Evangelio de un confín a otro de la tierra; De esta manera seguimos a Pablo, que habló en Cristo [ 2 Cor. 2, 17], y al divino colegio de los Apóstoles y a la santidad de los Padres, manteniendo las tradiciones [2 Thess. 2, 14] que hemos recibido; De esta manera cantamos proféticamente a la Iglesia los himnos de victoria: Alégrate sobremanera, hija de Sión; da pregones, hija de Jerusalén; recréate y regocíjate de todo tu corazón: El Señor ha quitado de alrededor de ti todas las iniquidades de sus contrarios; redimida estás de manos de tus enemigos. El señor rey en medio de ti: no verás ya más males, y la paz sobre ti por tiempo perpetuo [Soph. 3, 14 s; LXX].

Así, pues, quienes se atrevan a pensar o en­señar de otra manera; o bien a desechar, siguiendo a los sacríle­gos herejes, las tradiciones de la Iglesia, e inventar novedades, o rechazar alguna de las cosas consagradas a la Iglesia: el Evangelio. O la figura de la cruz, o la pintura de una imagen, o una santa reliquia de un mártir; o bien a excogitar torcida y astuta­mente con miras a trastornar algo de las legítimas tradiciones de la Iglesia Católica y a emplear, además, en usos profanos los sa­grados vasos o los santos monasterios; Si son obispos o clérigos, ordenamos que sean depuestos ; si monjes o laicos, que sean sepa­rados de la comunión.

Cuvioasa Maica noastra Parascheva cea noua.

"Întru tine Maică cu osârdie s-a mântuit cel după chip,
că luând crucea ai urmat lui Hristos
şi lucrând ai învăţat să nu se uite la trup,
căci este trecător, ci să poarte grijă de suflet,
de lucrul cel nemuritor.
Pentru aceasta şi cu îngerii împreună
se bucură cuvioasă Maică Parascheva, duhul tău".


Aceasta cu adevarat mare si vestita între femei, Cuvioasa si pururea pomenita Parascheva, s-a nascut într-un sat al Traciei, numit si din vechime si acum Epivata. Parintii fericitei erau de neam bun si mariti, înavutiti cu foarte multi bani si averi; mai mult însa îi marea si îmbogatea drept cinstirea lui Dumnezeu si a fi si a se numi crestini. Acestia dar aducând la lumina pe cuvioasa, întâi au renascut-o prin scaldatoarea cea dumnezeiasca, apoi pe cale înaintând, o învatara toata îmbunatatirea si asezarea cea dupa Dumnezeu; iar dupa ce a trecut al zecelea an, ades mergea cu maica sa la biserica Preacuratei Nascatoare de Dumnezeu si a auzit aceste dumnezeiesti binevestiri: "Cel ce voieste a veni dupa Mine, sa se lepede de sine si sa ridice crucea sa si sa urmeze Mie". Îndata toata a fost cuprinsa de aceasta si iesind din biserica, întâlnind un sarac, ascunzându-se de maica sa si dezbracând hainele stralucite si luminate ce purta, le-a dat lui si ea a îmbracat pe ale aceluia, luându-le pe acestea cu oarecare mestesugire înteleapta.
Iar dupa ce a venit acasa si au vazut-o parintii într-un astfel de chip s-au îngrozit si au batut-o ca sa nu mai faca asa. Ea însa nu numai de doua ori, ci de trei ori, si de multe ori, se zice ca dezbracând hainele sale, le-a dat saracilor, întru nimic socotind pentru aceasta, ocarile, îngrozirile si nesuferitele batai ale parintilor. Si acestea, adica în casa parinteasca erau ca niste preîntâmpinari ale roadelor ce mai pe urma erau sa odrasleasca în ea si pasiri spre trecerea peste om. Apoi fiindca nu mai putea suferi durerea duhului în suflet, fara stirea parintilor si al celor de un sânge cu ea, si a multimii slugilor, a ajuns la Constantinopol, unde gustând toate bunatatile cele dupa Dumnezeu, îndestulându-se de dumnezeiestile si sfintitele biserici si moastele sfintilor si fiind binecuvântata de sfintii barbati cei de acolo si întarindu-se cu rugaciunile lor, a iesit din cetate si a trecut în Calcedon de cealalta parte si de acolo a venit la Iraclia din Pont, calatorind cu picioarele sale. Iar parintii ei însisi si prin altii (ca nevoia este lesne iscoditoare), mult trudindu-se si locuri din locuri schimbând si cetati si sate calcând si neaflând-o, s-au întors acasa. Iar preafericita fecioara venind la Iraclia din Pont si sosind la un oarecare locas dumnezeiesc al Maicii lui Dumnezeu si intrând în el cu bucurie duhovniceasca, s-a asezat pe pamânt si l-a udat cu lacrimi; apoi s-a sculat si prin ruga sa umplându-se de har, cinci ani întregi a petrecut cu rabdare într-acest sfânt locas, tot felul de îmbunatatiri savârsind; caci întru rugaciunile de toata noaptea facea stari statornice si de diamant, ajunari neîncetate, batai în piept, tipete, tânguiri cu lacrimi nestinse, iar culcarea jos pe fata pamântului, cine dupa vrednicie va povesti; obiceiul smerit, cugetul cumpatat, curatenia inimii si plecarea ei spre Dumnezeu. Iar acum din destul de acestea desfatându-se a trimis Dumnezeu pe cei ce aveau sa o duca la Ierusalim; caci aceasta dorinta o avea si ruga pe Dumnezeu si pe Maica Lui de aceasta. Deci asa pregatita a iesit din biserica si îngradita cu ajutorul de sus, a ajuns la Ierusalim si îndestulându-se de toate cele sfinte si bune ale Ierusalimului, unde si blândele picioare ale Mântuitorului meu Hristos au calcat" si saturându-se si zburdând prin pustiul Iordanului ca o pasare, a nimerit la o viata cinstita de calugarite pustnice si aci a intrat. Însa cât s-a nevoit aci, prin care pe vrajmasul diavol pâna în sfârsit l-a stins, care mai înainte cu ispite multe si de tot felul a navalit asupra ei, neputând a le da în scris toate, putine oarecare din ele spre pomenire vom adauga aci. Bautura întrebuinta apa de izvor, si de aceasta foarte putina; trebuinta asternutului o împlinea o rogojina, iar îmbracamintea era o haina si aceasta foarte zdrentaroasa, cântarea pe buze neîncetata, lacrimile de-a pururea. Peste toate acestea înflorea dragostea, iar vârful îmbunatatirilor, smerita cugetare le cuprindea pe toate acestea.
Deci multi ani rabdând în aratata mânastire a calugaritelor si nevoindu-se prin foarte multe fapte bune, plinind al douazeci si cincilea an al vârstei, a iesit de aci si a venit la Ioppe si intrând într-o corabie a început a pluti pe calea ce ducea spre casa, si a ajuns cu corabia la limanul patriei sale dupa ce a suferit multe primejdii ale sfarâmarii de corabie, în mare. Apoi pururea pomenita a venit la Constantinopol, si dupa ce a cercetat dumnezeiestile locasuri si pe sfintii barbati a plecat si a venit la oarecare sat anume Calicratia si acolo la biserica sfintilor si întru tot laudatilor Apostoli s-a salasluit, nesocotind petrecerea parintilor de bun neam si batjocorind întelepteste uneltirile vicleanului înselator. Deci doi ani a petrecut acolo neîntinata porumbita si din potopul acestor curgatoare zburând a odihnit cortul ceresc, încredintând sfânt sufletul sau mâinilor îngeresti si prin ei locasurilor celor vesnice si dumnezeiesti; iar trupul cel din pamânt si înfrumusetat cu dumnezeiesti îmbunatatiri l-a ascuns în pamânt. Multa vreme dupa aceasta a trecut si cineva, rau cheltuind viata si obsteasca datorie împlinind, a fost îngropat aproape de cuvioasa; dar ea n-a vrut a-l suferi, prea viteaza; ci oarecaruia din barbatii sfinti aratându-se în vis: "Ridica, i-a zis, trupul acesta si-l arunca; ca soare fiind si lumina nu pot suferi întunericul si murdaria". Însa zabovind acel dumnezeiesc barbat, divina aratare a cuvioasei socotind-o vedere obisnuita, sau vis normal, si a doua, si a treia iarasi sfânta l-a strigat si cumplit l-a îngrozit. Si dupa ce calugarul si-a venit în sine dupa cum se cuvine si din numele cuvioasei, care îi arata cu degetul locul, prea degrab s-a sculat si cu sârguinta a descoperit poporului vedenia de acolo, care cu totii obsteste alergând ca la o vistierie foarte înavutita au sapat pamântul. Iar dupa ce s-a apropiat de sicriu, se umplea de mireasma, si acel sfânt trup al cuvioasei aflându-l întreg cu totul pazit, cu mâini cucernice l-au adus în biserica Sfintilor Apostoli, umplând aerul de mirezme si tamâieri si cântând dumnezeiesti psalmi. Însa câte minuni a savârsit dupa asezarea moastelor ei aici, Dumnezeul minunilor prin ea si pâna acum savârseste, cu neputinta este în scris a le da; caci covârsesc, ca sa zicem asa si numarul stelelor si nisipul marii. De vreme ce vindeca schiopi, surzi, ciungi, ologi si tot felul de boli, înca si cele atingatoare de moarte; si în scurt a zice, departeaza toata neputinta nevindecata, numai cu atingerea raclei, care nu înceteaza, nici va înceta, îmbelsugat a varsa tamaduiri, cu harul lui Iisus Hristos, Celui ce a preamarit-o.
Despre aceea, ca sfintele moaste ale cuvioasei aflate în cetatea Târnovei, capitala oarecând a crailor bulgari, s-a stramutat de aci la Belgrad, si de acolo în orasul Constantinopol, povestesc Evtimie si Rafail; asemenea si Meletie al Atenei si Dositei patriarhul Ierusalimului. Tot la acelasi loc aflam si povestire de stramutarea moastelor ei din orasul Constantinopol aici la Iasi. Adica, "Patriarhul Constantinopolului Partenie batrânul, luând bani de la domnitorul Moldaviei Vasilie, cu cuvânt ca sa plateasca datoriile Patriarhiei, spânzurând de zidul Fanarului din Constantinopol sfintele moaste, ce se pazeau în Patriarhie, le-a trimis aici catre stapânitorul Moldoaviei".
Iata ce zice despre aceasta Cantemir domnitorul Moldovei: "Sfânta Parascheva, precum aflam din cartile bisericesti, era stapâna a satului Epivatelor, pe care apoi l-a câstigat marele Apocavcos, Voievodul însusi stapânitorul Andronic Paleologul. Sultanul Murad al IV-lea a dat voie domnitorului Moldaviei, Vasilie, sa stramute sfintele ei moaste din biserica patriarhala a Constantinopolului; le-a câstigat acestea pentru cele multe si mari binefaceri si slujbe facute sfintei biserici celei mari; ca din însasi veniturile sale a platit peste 260 pungi ce datora ea turcilor si crestinilor. Însa fiindca la turci este oprit a stramuta mort peste trei mile, afara de trupul sultanului, a cheltuit peste 300 de pungi la Poarta otomana, ca sa ia voie pentru stramutarea sfintelor moaste si ca sa ia porunca catre un Capugibasa, ca sa le însoteasca la Moldavia. Toata povestirea aceasta a stramutarii acesteia este zugravita pe peretele de amiazazi al bisericii Sfintilor Trei Ierarhi, unde se afla sfintele ei moaste. Între alte lucruri se înfatiseaza acolo si Capugibasa cu ofiterii lui, mergând la petrecerea sfintelor moaste".
Aceasta stramutare de atunci este descrisa si pe marmura Cuvucliului, unde sunt asezate sfintele moaste, asa: "Cu vointa Tatalui, cu bineplacerea Fiului si cu conlucrarea Sfântului si de viata facatorului Duh, a Dumnezeului celui marit si închinat în Sfânta si cea de o fiinta si nedespartita Treime. Binecinstitorul si de Hristos iubitorul Ioan Vasilie Voievod cu mila lui Dumnezeu domnitor a toata Moldavia, fiind râvnitor si aparator al sfintei credinte rasaritene, dupa dumnezeiasca îngrijire, a stramutat din Constantinopol cu multa osârdie si prea multa dorinta aceste cinstite moaste ale Cuvioasei Maicii noastre Parascheva cea din Târnova. Aceasta stramutare a fost a treia. Iar preasfintitul si fericitul a toata lumea patriarh Partenie, cu toata bunavointa si sfatul Bisericii, a trimis aceste sfinte moaste ca pe o vistierie dumnezeiasca, cu prea fericitii trei mitropoliti: Ioanichie al Iracliei, Partenie al Adrianupolei si Teofan al Paleon-Patronului, în zilele prea sfintitului Varlaam mitropolitul Sucevei si a toata Moldavia; iar binecinstitorul si de Hristos iubitorul si cu mila lui Dumnezeu stapân al nostru si domnitor a toata Moldavia Ioan Vasilie Voievod, de acasa iesind cu evlavie si din tot sufletul primind aceasta nepretuita vistierie, potrivit le-au pus si le-au pastrat în cea noua zidita biserica a Sfintilor Trei Ierarhi si ai lumii dascali: Vasilie cel Mare, Grigorie de Dumnezeu cuvântatorul si Ioan Gura de Aur, spre cinstea si marirea lui Dumnezeu celui laudat în Treime si spre vesnica solire a Preacuvioasei Maicii noastre Parascheva, pentru lasarea pacatelor sale si a tot stralucit neamul lui. În anul de la Adam 7149, iar al domniei lui al 8-lea, în 13 iunie; în acelasi an s-a nascut si preaiubit fiul lui, Ioan Stefan Voievod, ca-ruia sa-i dea Domnul zile îndelungate si viata de multi ani. Amin".
Din traditie avem povestiri de multe minuni savârsite de cuvioasa în anii cei dinaintea noastra, pe care nu s-a sârguit cineva a le aduna si a le publica spre lauda lui Dumnezeu slavitorul sfintilor Sai; înca si în zilele noastre nu conteneste a face minuni celora ce cu credinta alearga la ea. Caci câti neputinciosi au evlavie la sfintele moaste, alergând cu credinta sau din acoperamânturile puse la capul cel sfânt al Cuvioasei luând si purtând, dobândesc vindecare! Si la neplouare, sau alta nevoie mare, facând litanie crestinii cu sfintele moaste, nu se lipsesc de cerere. Ci si în patria ei Epivata unde, precum se zice, casa ei parinteasca a fost prefacuta în biserica cu numele ei, cuvioasa face multe minuni, careia se cuvine marirea în vecii vecilor. Amin.
In ziua de 13 iunie 1641, cinstitele moaste au fost asezate in minunata biserica a manastirii "Sfintii Trei Ierarhi", ctitoria domnitorului. Cinstitele moaste au ramas aici pana in anul 1884, cand au inceput lucrarile de restaurare a sfantului lacas, fiind mutate in paraclisul manastirii. Dar in seara zilei de 26 decembrie 1888, dupa slujba Vecerniei, din neatentie a ramas aprinsa o lumanare din sfesnicul de langa racla din lemn in care erau asezate cinstitele moaste; peste noapte sfesnicul a ars, iar focul s-a extins la catafalcul pe care era asezata racla, arzand mocnit toata noaptea, fiind prefacut totul intr-un morman de jar. A doua zi dimineata, autoritatile de stat si bisericesti, preotii si credinciosii au constatat ca cinstitele moaste au ramas neatinse, inca o minune savarsita prin puterea lui Dumnezeu.
Ridicate din mormanul de jar, moastele Cuvioasei au fos adapostite provizoriu in altarul paraclisului de la manastirea Sfintii Trei Ierarhi si in curand stramutate in noua catedrala mitropolitana din Iasi, care fusese sfintita cu putin timp mai inainte, la 23 aprilie 1887. Aici se gasesc si astazi, fiind cinstite de obstea dreptcredinciosilor moldoveni, care ii cer sa mijloceasca pentru ei inaintea tronului ceresc, fiind socotita ca o adevarata ocrotitoare a Moldovei.
In sedinta sa din 28 februarie 1950, Sfantul Sinod al Bisericii noastre a hotarat canonizarea unor sfinti romani, precum si generalizarea cultului unor sfinti ale caror moaste se gasesc in tara noastra. Hotararea respectiva a fost transpusa in fapta in cadrul unor mari festivitati bisericesti in cursul lunii octombrie 1955. In cazul Cuvioasei Parascheva, generalizarea cultului ei s-a facut in catedrala mitropolitana din Iasi, la 14 octombrie 1955, in prezenta a numerosi ierarhi romani, precum si a unor reprezentanti ai Bisericilor ortodoxe Rusa si Bulgara.
De astfel, Cuvioasa Parascheva a fost cinstita in Biserica noastra veacuri de-a randul. Inca de la sfarsitul veacului al XIV-lea exista o biserica cu hramul Prea Cuvioasa Parascheva in Rasinari, langa Sibiu, iar in anul 1408 aflam de existenta unei biserici cu hramul Sfanta Vineri in "Targul Romanului". Multe alte biserici din Moldova sau din alte parti ale pamantului romanesc au acelasi hram. Chipul ei sau scene din viata ei sunt zugravite in diferite biserici romanesti. Dreptcredinciosii crestini de pretutindeni o venereaza atat prin participarea lor la slujbele din 14 octombrie a fiecarui an, iar cei din Iasi si imprejurimi prin inchinarea in fata cinstitelor ei moaste, cerandu-i ocrotire si ajutor.
Drept aceea, sa o cinstim si noi si sa ne rugam asa:
"Spre tine pururea nadajduind, de multe boli si primejdii s-a izbavit tara aceasta, alinand si prefacand mania cea cu dreptate pornita asupra noastra de la Dumnezeu, in buna si milostiva indurare, prin ale tale rugaciuni; dar si acum ingrozindu-ne marile nenorociri, la tine nazuim cu lacrimi, sa ne ajuti ca sa scapam din primejdie si sa cantam lui Dumnezeu: Aliluia." (Din Acatistul Cuvioasei, Condacul 3).

Misterio y Sacerdocio

Misterio del Cristo Misterio de la Iglesia.
Aquellos que comulgan en el Cuerpo y en la Sangre del Resucitado pueden entrever lo que san Pablo denomina, en su epístola a los Colosenses, el Misterio del Cristo (4:3): "Misterio escondido desde hace siglos y las generaciones y que ahora viene de ser manifestado a sus santos" (1:26).
Intentemos, no de "comprender" este misterio — pues es infinitamente mas grande y mas profundo que la inteligencia humana, que no puede "comprender," es decir, contener lo que es mas pequeño que ella, pero contemplarlo con admiración, como Pablo cuando lo encontró sobre el camino a Damasco.
El Cristo, Hijo de María, es un hombre como nosotros: todo lo que hay en Él es comunicable a los otros hombres: es el porqué nos puede salvar.
Este mismo Cristo, Hijo único de Dios, es Dios, el mismo y único Dios que su Padre y que el Espíritu Santo, es el porqué nos puede unir al Padre.
Por la comunión en el Cuerpo y en la Sangre del Cristo, somos incorporados a su Cuerpo de Resucitado, nos tornamos un solo cuerpo con Él y nos tornamos participantes de Su divinidad. Este cuerpo misterioso constituido por la unión de la Cabeza (Cristo) con los miembros (los comulgantes) se denomina Iglesia.
La cabeza de un cuerpo actúa poniendo en movimiento a sus miembros. Lo mismo el Cristo actúa en el mundo solicitando a los fieles, miembros de su Iglesia. El Cristo es presente y actuando en el mundo por su Iglesia. Los miembros de esta responden a los impulsos de la Cabeza escuchando su Palabra.
Los miembros de un cuerpo no es un miembro viviente que si la sangre que viene del corazón pasa dentro de ese miembro. Los miembros de la Iglesia no son miembros vivientes que si el Espíritu Santo circula en ellos, uniéndolos entre ellos y uniéndolos a la Cabeza.
Este hecho misterioso que hombres, pecadores pero creyentes son unidos por la obra del Espíritu Santo al Cuerpo del Cristo resucitado, se tornan miembros de un solo Cuerpo, el Cristo, y de esta manera prolongan en el mundo de hoy la acción del Cristo, de suerte que habla y actúa por ellos, se llama el misterio de la Iglesia.
Este misterio del Cristo o misterio de la Iglesia tiene varios aspectos que san Pablo denomina (1 Corintios 4:1) "misterio de Dios," que los cristianos ortodoxos llaman comúnmente "misterios" simplemente, que el idioma latino a denominado sacramenta, de donde la palabra habitual en español de sacramentos.

Sacerdocio de Cristo Sacerdocio de la Iglesia.
Sacerdocio De Cristo
EL Señor Jesús siendo a vez Dios y hombre, restableció la comunicación entre Dios y los hombres: hace escuchar a los hombres la voz de Dios, pues es la Palabra de Dios hecha carne; y por otra parte, ascendió al cielo con su naturaleza de hombre, Abogado de los hombres al lado de Dios su Padre; "Intercede ante el rostro de Dios en nuestro favor" (Hebreos 9:24), presentándole la "ofrenda que Él ha hecho de Sí mismo una vez por todas" (Hebreos 7:27) por Sus hermanos los hombres. Es esta función de intermediario entre Dios y los hombres que denominamos "Sacerdocio del Cristo"; a causa de esta función "sacerdotal" el Cristo recibe en la Epístola a los Hebreos y en toda la Tradición cristiana el título de "sumo sacerdote": "Tú eres sacerdote para la eternidad"; ya decía de Él el Salmo 109 [110] citado por la Epístola a los Hebreos.

El Sacerdocio de la Iglesia.
Cristo Es nuestro Sumo Sacerdote; pues, lo hemos visto, el Cristo actúa en el mundo por su Cuerpo, la Iglesia; es pues por Ella que hace escuchar su Voz en el mundo; es Ella que lo asocia a la ofrenda que Él presenta de Sí mismo al Padre. el Cristo no hace nada sin su Cuerpo, la Iglesia participa pues plenamente al sacerdocio del Cristo: es decir que, para actuar en el mundo, pero también para hablar a su Padre, el Señor Jesús pide la colaboración de cada uno de nosotros: "Ustedes son colaboradores de Dios," nos dice san Pablo (1 Corintios 3:9). Cuando un cristiano se inclina con amor sobre alguien quién sufre, él es la mano del Cristo; cuando un cristiano anuncia la verdad del Evangelio, él es la boca del Cristo. Todavía se necesita que este fiel del Cristo previa y verdaderamente se haya tornado miembro del Cuerpo del Cristo, que el Espíritu Santo lo haya cambiado en miembro del Cuerpo de Cristo, haya verdaderamente hecho de él un "sacerdote," es decir un hombre que participa a la obra del Cristo: al sacerdocio del Cristo. Es este cambio que se efectúa en lo que nosotros denominamos el misterio de la crismación.

jueves, 11 de octubre de 2007

Tropario y Kontaquio de la fiesta de la Madre de Dios del Pilar


Tropario de la Madre de Dios del Pilar

Tono I

Oh Virgen, te has aparecido al apóstol Santiago,
cuando predicaba al salvador en Hispania
y en un Pilar de Jaspe
fue puesta tu imagen milagrosa
derramando curaciones sobre tu pueblo
que te alaba diciendo, oh Madre de Dios:
¡Gloria a tu grandeza, oh Pura!
¡Gloria a tu aparición milagrosa!
¡Gloria a su providencia para con nosotros, oh Reina de los Ángeles!

Kontakion

Tono III

Hoy la Virgen
se aparece al bendito apóstol Santiago,
consagrando como su jardín,
la bendita tierra de Hispania.
Los ángeles llevan con temblor su Imagen Santa
Cantando un himno celestial en su honor:
¡Regocíjate, oh Madre de Dios del Pilar!

Día 12 de Octubre Fiesta de la Virgen del Pilar



La tradición, tal como ha surgido de unos documentos del siglo XII que se conservan en la catedral de Zaragoza, se remonta a la época inmediatamente posterior a la Ascensión de Jesucristo, cuando los Apóstoles, fortalecidos con el Espíritu Santo, predicaban el Evangelio. Se dice que, por entonces (año 40 después de Cristo), el Apóstol Santiago el Mayor, hermano de San Juan e hijo de Zebedeo, predicaba en España. Aquellas tierras no habían recibido el evangelio, por lo que se encontraban atadas al paganismo.
Los documentos dicen textualmente que Santiago, "pasando por Asturias, llegó con sus nuevos discípulos a través de Galicia y de Castilla, hasta Aragón, el territorio que se llamaba Celtiberia, donde está situada la ciudad de Zaragoza, en las riberas del Ebro. Allí predicó Santiago muchos días y, entre los muchos convertidos eligió como acompañantes a ocho hombres, con los cuales trataba de día del reino de Dios, y por la noche, recorría las riberas para tomar algún descanso".
En la noche del 2 de enero del año 40, Santiago se encontraba con sus discípulos junto al río Ebro cuando "oyó voces de ángeles que cantaban y vio aparecer a la Madre de Dios, de pie sobre un pilar de mármol". La Santísima Virgen, que aún vivía, le prometió al Apóstol que el pilar "permanecerá este sitio hasta el fin de los tiempos para que la virtud de Dios obre portentos y maravillas por mi intercesión con aquellos que en sus necesidades imploren mi patrocinio".
Muchos historiadores e investigadores defienden esta tradición y aducen que hay una serie de monumentos y testimonios que demuestran la existencia de una iglesia dedicada a la Virgen de Zaragoza ya en el siglo IV. El más antiguo de estos testimonios es el famoso sarcófago de Santa Engracia, que se conserva en Zaragoza desde el siglo IV, cuando la santa fue martirizada. El sarcófago representa, en un bajo relieve, el descenso de la Virgen de los cielos para aparecerse al Apóstol Santiago.
Asimismo, hacia el año 835, un monje de San Germán de París, llamado Almoino, redactó unos escritos en los que habla de la Iglesia de la Virgen María de Zaragoza, "donde había servido en el siglo III el gran mártir San Vicente", cuyos restos fueron depositados por el obispo de Zaragoza, en la iglesia de la Virgen María. También está atestiguado que antes de la ocupación musulmana de Zaragoza (714) había allí un templo dedicado a la Virgen.
Todo esto nos habla de una tradición de la Iglesia española indivisa que tendríamos que tener en cuenta todos los cristianos ortodoxos que somos españoles o vivimos en España ya que este nombre del Pilar podría ser el título más antiguo de la Madre de Dios en estas tierras y que quizás esté relacionado con el antiguo icono de la Madre de Dios de Hispania presente en el calendario general de la Iglesia Ortodoxa.

Cierta o no cierta, no es mi intención ponerla en duda en estos momentos, al contrario, como cristiano ortodoxo español tomo esta venerable tradición de la Iglesia Hispana en la cual queda presente la protección de la Madre de Dios sobre la Iglesia. Ella es el Pilar firme que la sostiene como frecuentemente aparece en muchos textos de la liturgia y de los Padres. La Madre de Dios es “la columna que guiaba y sostenía día y noche al pueblo en el desierto” (cf Sabiduría 18, 3; Éxodo 13, 21-22). A la salida de la esclavitud de Egipto, en la travesía del desierto, Dios no abandonó a los suyos. El Señor caminaba “delante de ellos”, guiándolos y alumbrándolos, con una columna de nube y de fuego. La Virgen, en el pueblo peregrino que es la Iglesia, es signo permanente de la presencia y de la compañía de Dios. Ella es la que nos anima, como al apóstol Santiago, en el trabajo de dar testimonio con nuestras vidas de nuestra fe en una sociedad si no pagana como aquella, si totalmente indiferente ante el mensaje del Evangelio.

Hoy día de la madre de Dios del Pilar, fiesta nacional, pidámosle a ella que nos guarde y proteja siempre que ilumine a nuestros gobernantes (que bien necesitados están) y guarde y proteja a todos los españoles, ortodoxos o no y a todos los que residen en esta hermosa tierra que fue iluminada por los Santos Apóstoles Santiago y Pablo.

sábado, 6 de octubre de 2007

LA ESPIRITUALIDAD Y LA DIRECCIÓN ESPIRITUAL

Metropolita de Surozh ANTONI (Blum):

Informe pronunciado el 19 de mayo de 1987 en la Conferencia Eclesiástica Científica Internacional "La teología y la espiritualidad de la Iglesia Ortodoxa Rusa" reunida en el Departamento Editorial del Patriarcado de Moscú.

Quisiera primero definir el vocablo "espiritualidad". Por lo general, hablando de la espiritualidad suponemos ciertas manifestaciones religiosas de nuestra vida espiritual, tales como la oración o el ascetismo. Pero, creo que es menester recordar: la espiritualidad es la.manifestació n de lo que se opera misteriosamente en nosotros por acción del Espíritu Santo. En este caso la dirección espiritual no consistirá en educar al hombre según ciertos principios ni en enseñarle a desarrollarse ascéticamente o a aprender a rezar con arreglo a ciertos cánones, sino en que el director espiritual, cualquiera que sea su grado de espiritualidad, vigile bien qué opera en el hombre el Espíritu Santo, y despierte Su obra, defendiéndolo contra las tentaciones o caídas, contra las vacilaciones de la falta de fe. Como resultado, esta actividad de dirección espiritual puede parecer, por una parte, mucho menos intensa, pero, por otra parte, mucho más sustancial de que pensamos con frecuencia.

La dirección espiritual no es un concepto unívoco. A mi modo de ver, existen tres grados, tres tipos de directores espirituales. Al nivel más básico lo es el sacerdote, que recibió la gracia del sacerdocio, lo que no sólo le da el derecho, sino también la bendita fuerza de administrar el sacramento de la Eucaristía, el sacramento del Bautismo, el sacramento de la Comunión y también el sacramento de la Confesión, o sea, la reconciliació n del hombre con Dios.

Un gran peligro que corre el sacerdote joven e inexperto, lleno de entusiasmo y de esperanza, radica en que muchas veces los jóvenes egresados de las escuelas teológicas se creen que la ordenación les haya proporcionado la inteligencia, la experiencia y la habilidad de distinguir entre los espíritus... Pretenden ser lo que en los libros ascéticos se denominó neostárets. Estos jóvenes no tienen todavía madurez espiritual y ni siquiera conocimiento producto de la mera experiencia personal, pero creen haber aprendido cuanto les pueda ayudar a tomar al pecador aparenté de la mano y llevarlo de la tierra al cielo. Lamentablemente, con demasiada frecuencia el joven sacerdote simplemente a fuerza de su sacerdocio y no porque sea espiritualmente experto o porque lo haya inducido en ello Dios, comienza a dirigir a sus hijos espirituales dándoles órdenes: "No hagas esto, haz esto, no leas libros tales, asista a la iglesia, haz reverencias. .." Como resultado tenemos una caricatura de la vida espiritual de sus víctimas, que hacen cuanto, tal vez, habían hecho los ascetas, pero lo habían hecho partiendo de su experiencia espiritual y no como animales amaestrados. Y en el caso del director espiritual es una catástrofe, porque él irrumpe en un dominio en que no tiene derecho a irrumpir ni experiencia para hacerlo.

Creo que es una cuestión candente para el sacerdocio. Uno puede ser "stárets" sólo por la gracia de Dios; es un fenómeno carismático, es un don, y no se puede aprender a ser "stárets", como no se puede optar por ser genial. Todos nosotros podemos sólo soñar con ser geniales, pero comprendemos perfectamente que Beethoven o Mozart, Leonardo da Vinci o Rubliov poseyeron la genialidad que no puede aprenderse en escuela alguna ni siquiera por medio de una larga experiencia, porque es un don dispensado por Dios.

A menudo los jóvenes sacerdotes, en función de su edad o su madurez (más bien, falta de madurez) espiritual dirigen a sus hijos espirituales en vez de darles el crecimiento.

Darles el crecimiento quiere decir tratarles como el jardinero trata las flores y otras plantas. Es necesario conocer el carácter del suelo y de la planta, es necesario conocer las condiciones climatológicas y otras, y únicamente en este caso se puede ayudar a esta planta a desarrollarse de un modo que corresponde a su naturaleza (¡es todo cuanto se puede hacer!). ¡No se puede quebrar al hombre para hacerlo semejante a uno mismo!

En una ocasión un escritor religioso de Occidente dijo: "A un hijo espiritual se puede conducir sólo a él mismo, y el camino hacia su fuero interno... es a veces muy largo". Si ustedes leen el Santoral, se darán cuenta de que los grandes stárets sabían ver en otro hombre su propiedad exclusiva, inconfundible y sabían dar a este hombre, y a otro, y a otro más la posibilidad de ser también él mismo y no la réplica de este stárets o, peor aún, su repetición estereotipada. Tomen un ejemplo de la historia de la Iglesia Rusa: el de Antonio del monasterio de las Cuevas, de Kíev, y Teodosio. Este fue educado por aquél, pero Antonio era asceta y Teodosio fundó la vida cenobítica. Diríase: ¿cómo pudo Antonio prepararlo para que fuese un hombre que él mismo no había querido ser y para que hiciese lo que él mismo no hubiese hecho, a lo que Dios no le había llamado? Creo que en este caso hay que distinguir muy bien entre nuestro deseo de hacer a un hombre semejante a nosotros y nuestro deseo de hacerlo semejante a Cristo.

Lo propio de un stárets es un bendito don, es la genialidad espiritual, y por eso hadie de nosotros puede pensar en comportarse como stárets. Pero existe también un intermedio: la paternidad. Muy a menudo los sacerdotes jóvenes, otra vez me refiero a ellos, y no muy jóvenes, por el mero hecho de que les llaman "padre Fulano" o "padre Mengano", se imaginan que no son simples sacerdotes confesores, sino realmente "padres" en el sentido en que el apóstol San Pablo dijo: "...aunque tengáis diez mil pedagogos en Cristo, no tendréis muchos padres; que en Cristo Jesús yo os engendré por el Evangelio" (1 Co.4,15). La paternidad consiste en que una persona (puede ser no sacerdote incluso) engendra para la vida espiritual a otra persona. Esta, habiendo escrutado a aquélla, vio -como reza un viejo proverbio- el resplandor de una vida eterna en sus ojos y en su rostro y por eso pudo acercársele y pedir que fuese su pedagogo y director. Lo segundo que distingue al padre es que éste parece ser de una misma sangre y un mismo espíritu que su discípulo y puede conducirlo; entre ellos no existe armonía solamente espiritual, sino también animal.

Ustedes recordarán que en su tiempo el desierto de Sinaí estaba superpoblado de ascetas y pedagogos. Pero los hombres no se ele-gian un pedagogo buscando al mas famoso, no se dirigían a aquel del que habían oído hablar más cosas buenas, sino que encontraban un pedagogo al que comprendían y el que les comprendía a ellos.

Esto es muy importante, porque la obediencia no constiste en cumplir a ciegas las indicaciones de aquel que tiene sobre uno un poder físico-material o espiritual-animal. La obediencia supone que el hijo espiritual, después de haberse elegido un pedagogo en que cree incondicionalmente y en que ve lo que busca, no sólo atiende a cada palabra de éste, sino que también hace el caso al tono de su voz y procura, a través de todo en que se minifiesta la personalidad de este stárets y su experiencia espiritual, hacerla suya y sobrepasar a sí mismo, rebasar los límites de la medida que hubiera podido alcanzar con sus propios esfuerzos.

La obediencia es ante todo el don de atender. Atender aplicando no sólo el oído, sino también la inteligencia, todo el ser, abriendo el corazón y contemplando piadosamente el misterio espiritual de otro hombre. Y el padre espiritual, si es que puede serlo para uno, debe mostrar una profunda piedad por lo que en uno obra el Espíritu Santo. El padre espiritual debe ser capaz de ver en el hombre la inalienable belleza de la imagen de Dios. A veces esto puede costar esfuerzos, atenciones serias y actitud piadosa hacia aquel que acude a él. Si es incluso un hombre deteriorado por el pecado, el padre espiritual debe ver en él un icono damnificado por las condiciones de vida, por la negligencia o por el sacrilegio de los hombres; debe ver en él un icono y admirar lo que de este icono queda. Y sólo por eso, sólo por la divina belleza que tiene, debe trabajar para eliminar cuanto deforma esta imagen de Dios. Pero si el director espiritual no es capaz de ver en el hombre esta belleza celestial, ver que empieza a materializar ya su vocación de hacerse Hombre Dios según la imagen de Cristo, no puede dirigirlo. Por eso al hombre no lo construyen, no lo hacen, sino le ayudan a crecer a medida de su propia vocación.

Ahora es cuando cabe aclarar un poco más la acepción del vocablo "obediencia". Por lo general hablamos de la obediencia como de la supeditación, la sujeción y muy a menudo incluso del avasallamiento al confesor, al que completamente en vano y en perjuicio del sacerdote mismo hemos llamado "padre espiritual" o "stárets". Entretanto, la verdadera obediencia que consiste en prestar la atención con todas las fuerzas del alma compromete por igual tanto al director espiritual como al dirigido. El director espiritual debe atender con toda su experiencia, con todo su ser, con todas sus oraciones y -diré más- con toda la acción que realiza en él la gracia del Espíritu Santo lo que este último obra en la persona que se le ha confiado al director espiritual. Este debe seguir los caminos del Espíritu Santo en esta persona, debe venerar lo que Dios obra, sin procurar educa'rla según su propia imagen o tal como cree que debe desarrollarse, y no convertirla en víctima de su dirección espiritual. Se necesita la mansedumbre por ambas partes. Esperamos la mansedumbre por parte del hijo espiritual, pero ¡cuánta mansedumbre debe tener el director espiritual para no irrumpir jamás en el dominio sagrado, para tratar el alma humana tal como fue ordenado a Moisés tratar la tierra alrededor de la zarza ardiendo! En potencia o en realidad cada hombre es ya esta zarza y cuanto lo rodea es una tierra santa que el director espiritual puede pisar sólo habiendo desatado el calzado. Debe sentirse como el publicano que está a la puerta del templo, mira en el templo y sabe que es un dominio del Dios vivo, que es un lugar santo, y él tiene derecho a entrar únicamente si el mismísimo Dios se lo manda y le sugiere qué hacer y qué decir.

Una de las tareas del director espiritual consiste en educar al hombre en la libertad espiritual, en la regia libertad de los hijos de Dios. No debe mantenerlo en el infantilismo toda vida, haciéndolo acudir a él por cualquier bagatela, sino que debe enseñarle a que él mismo oiga lo que el Espíritu Santo reza con verbos inefables en su corazón. Piensen en lo que significa la "humildad". "Humildad" es la conformidad, quiere decir, que el hombre se ha conformado con la voluntad de Dios, entregándosele sin reserva, con plenitud y alegría y diciendo: "Señor, haz lo que quieras conmigo". Y en consecuencia se ha conformado también con todas las circunstancias de su propia vida. Todo -lo bueno y lo terrible- es don concedido por Dios. Dios nos ha llamado a ser sus mensajeros en la tierra y nos envía adonde están las tinieblas para que seamos luz, adonde está la desesperanza para que seamos esperanza, adonde la alegría se ha extinguido para que seamos alegría, etcétera. Y nuestro puesto no está sólo donde existe serenidad -en el templo, cuando se celebra la liturgia y donde estamos protegidos por la presencia de Dios-, sino también allí donde nos encontramos solos como presencia de Cristo en la oscuridad del mundo deformado.

Por otra parte el vocablo latino "humildad" es derivado del vocablo "humus", cuyo significado es "tierra vegetal". San Teófanes el Recluso escribe a este propósito: piensen lo que es la tierra. Yace silenciosa, abierta, indefensa, vulnerable frente al cielo. Del cielo recibe la aridez, los rayos del Sol, la lluvia y el rocío, pero recibe también lo que llamamos abonos, o sea, estiércol y cuanto echamos en ella. ¿Y qué pasa? Aporta frutos, y cuanto más soporta lo que nosotros llamamos humillación, ofensa, tanto mayores son los frutos. Pues la humildad estriba en abrirse ante Dios en plenitud y no protegerse en absoluto contra El, contra la acción del Espíritu Santo, contra la imagen de Jesucristo, contra Su doctrina; la humildad estriba en ser vulnerables a Su gracia igualmente que lo somos a las manos de los hombres, a sus palabras hirientes, a sus hechos crueles, a sus mofas. La humildad estriba en entregarnos a Dios para que tenga derecho, según nuestro propio deseo, a obrar con nosotros lo que El quiera, en aceptarlo todo, en abrirnos y en dar la libertad al Espíritu Santo para conquistarnos.

Creo que si también el director espiritual va a aprender la humildad en este sentido: ver la belleza sempiterna en el hombre y conocer el puesto que le corresponde (y este puesto es tan sagrado, tan divino: el del padrino del novio que asiste al encuentro de los novios), podrá ser realmente acompañante de su hijo espiritual, podrá marchar sobre los pasos de él, protegiéndolo, apoyándolo y no irrumpiendo jamás en el dominio del Espíritu Santo. En este caso la dirección espiritual se hace parte de la espiritualidad, parte del crecimiento de la santidad a que está llamado cada uno de nosotros y que cada padre espiritual debe ayudar a consumarlo a sus hijos espirituales.